Hoy estrena su nuevo contrato desvelado por MARCA, pero en 2023 una ‘extraña’ desconvocatoria ante el Alavés lo puso al borde de su salida del club
Asencio estrena hoy el nuevo contrato con el Real Madrid desvelado en exclusiva por MARCA, pero en 2023 una ‘extraña’ desconvocatoria ante el Alavés lo puso al borde de su salida del club. El jueves 21 de diciembre de 2023 Asencio se vio fuera del Real Madrid. Aquel día se disponía a hacer el viaje que hará dentro de dos semanas a Vitoria para medirse al Alavés. Iba a ser su primera convocatoria con el primer equipo después de que Ancelotti lo incluyese en una lista de 20 jugadores, con varios canteranos por las bajas. Pero entonces llegó el mazazo: «Tú no vienes», le comunicaron poco antes de salir. El defensa vio como Tobias, Nico Paz, Fran González y Gonzalo se subían al autobús rumbo al aeropuerto y él se quedaba en tierra. El sueño se volvió pesadilla y Asencio dejó Valdebebas con la sensación de que en el Madrid sería imposible triunfar y que tendría que hacer las maletas.

En la inesperada decisión del Madrid coleaba la condición de Asencio como investigado por un presunto delito de difusión de un vídeo sexual, una polémica que había sacudido a La Fábrica cuatro meses atrás con otros tres canteranos implicados. Asencio estaba jugando con normalidad en el Castilla y Ancelotti lo había incluido en la convocatoria por las numerosas bajas en defensa, tanto en el primer equipo (Carvajal, Mendy, Militao y Alaba) como en el Castilla (Carrillo y Marvel), lo que reducía las alternativas para reforzarse. Sin embargo, la decisión final del club fue la de sacar al futbolista de la expedición. El club le dijo que era lo mejor y que querían protegerle lo máximo posible, después de que la llamada hubiese generado revuelo. A la delicada situación se unía el hecho de que el jugador estaba citado para declarar en los Juzgados de Plaza de Castilla al día siguiente del partido y todo ello dio pie a una decisión difícil de asimilar para Asencio. El propio jugador no las tuvo todas consigo y en ningún momento quiso lanzar las campanas al vuelo hasta verse en el avión. Pero eso nunca ocurrió porque sus malos presagios se confirmaron.